El secretario de Medios de la Nación, Juan Manuel Abal Medina, hijo de uno de los asesores de Juan Domingo Perón y sobrino de uno de los fundadores de Montoneros, es politicólogo, doctor en Ciencias Políticas y profesor de Sistemas Políticos Comparados. El fin de semana visitó La Plata para cerrar un encuentro de jóvenes y dialogó con Diagonales sobre la actualidad política, sobre la visita de la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) y sobre el rol de los jóvenes en la Argentina del presente.-¿Qué lectura hace del discurso del jueves pasado de la presidenta Cristina Fernández en la localidad de José C. Paz?
-Creo que fue una clase sobre política. Una clase de cómo se entiende un proceso histórico y como se está trabajando para transformar el país, cada uno debe aportar para eso y de la forma que corresponde.
-¿Entonces para usted no fue un discurso contra Moyano como algunos multimedios lo muestran?
-De ninguna manera, fue un discurso mucho más amplio donde la Presidenta habló del país, del conjunto y lo que dijo simplemente es que cuando uno esta reconstruyendo la Argentina todos tenemos que ver el interés general y no simplemente el interés particular y cuando en un país las corporaciones, sean las que sean, piensan más en los intereses particulares que en los intereses generales no hay modo de país posible.
-Hace pocos días estuvieron en la Argentina las autoridades de la SIP, quienes mostraron preocupación por la supuesta falta de libertad de prensa. ¿Su opinión como secretario de Medios?
-Cuando estuvieron en mi oficina ante ese comentario les dije que prendan la tele y lean los diarios a ver cómo tratan a este gobierno y si no hay libertad de prensa. En un momento me dijeron "pero bueno han surgido nuevos diarios, muchos vinculados al Gobierno" y entonces les comenté, justo esta semana salieron dos, uno de Clarín y otro de Perfil que precisamente no hablan muy bien de la gestión de Cristina. La realidad es tan clara que no tienen palabras, la operación de traer a la SIP a la Argentina fue una operación de otro momento histórico, es similar a cuando ahora trajeron a Mario Vargas Llosa creyendo que haría una declaración al multimedio y todos reproducirían lo mismo. Bueno, en ese momento se comprobó que fue una operación que no tiene ningún asidero y la misma realidad desmintió en forma contundente esa visita.
-Y la carta que envió luego la SIP. ¿Lo sorprendió?
-Para nada, la verdad es que la reunión de ese primer día de su visita iban sacando cada uno esos puntos y nosotros argumentábamos y no nos pudieron discutir nada. Y saber que, al día siguiente en la conferencia de prensa, que se expresaban como si no hubiera existido esa reunión previa y las preguntas que se hacían se notaba que se las había dado previamente Héctor Magnetto nos irritaba. Desde antes que vinieran, le habían redactado las respuestas que iban a decir. Me acuerdo que el primer tema fue la publicidad oficial y cuando les contamos que era el 3% aproximadamente pusieron cara de sorpresa porque Magnetto les había dicho que era el 70 o el 80%. Luego en la conferencia volvieron a decir lo mismo que tenían escrito en el guión y no lo que podían pensar, una cosa patética de un grupo de dueños de medios que creo que le costó bastante mantener un poco de dignidad y no lograron hacerlo.
-Un análisis sobre el rol de los jóvenes en la política.
-Creo que el regreso de la juventud a la política es una maravilla, una de las grandes obsesiones que tuvo Néstor en todos los momentos, especialmente en la etapa que me toco a mí acompañarlo, en los últimos meses. La vuelta de los jóvenes demuestra que la política se recuperó. En cambio, cuando la política está reducida a algo individual, de beneficios personales, es bueno que los jóvenes no se enganchen con eso. La recuperación de la política pensada en términos colectivos de sueños, utopías, ideales demuestra que esto es posible y que día a día esta enorme y maravillosa juventud se va acercando nos demuestra que vamos por el buen camino.
-¿Entonces habrá que darle cargos a los jóvenes?
-Sin ninguna duda. Hay que terminar con eso que los jóvenes son el futuro porque eso significa negar el presente, el tema es ahora, lo que siempre decía Néstor, los jóvenes tienen que ser transgresores, pelear todos los días por los ideales y pelear por profundizar el modelo, romper todas las tranqueras, romper todos los diques y sumarse en todos los niveles y a todos los cargos. Los que se asustan con eso es que no entienden como es la historia o sí la entienden es por eso que quieren frenarla.
-Volviendo a la política partidaria, ¿algunos multimedios dicen que quizás seas usted el hombre que acompañe a Cristina en la fórmula electoral de este año?
-Pensar esas cosas es un disparate. La verdad, creo que muchas veces esas mismas empresas periodísticas monopólicas, donde los intereses están primero, creen que somos como ellos, hablando en nombre de uno y no del otro funcionario y de esa manera crear fisuras en el Gobierno, pero acá todos somos soldados de un proyecto general que nos excede por mucho y los lugares que uno tenga son los de menos sobre la importancia del proyecto que se esta construyendo. Mire, los que creen que lo individual es más importante que el proyecto colectivo siempre se equivoca y eso es lo que demostraron Néstor y Cristina cuando cambiaron la historia, mostrar que lo importante no era pensar en uno sino en todos.
Fuente: DIAGONALES - El Argentino.com
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